
Rechazan mesa de diálogo en Cusco y obligan a extender suspensión de trenes.
Decenas de pobladores de Machu Picchu Pueblo realizaron ayer una nueva protesta en contra de las empresas ferroviarias que operan la ruta turística hacia la ciudadela inca y en rechazo a las autoridades nacionales y regionales por instalar la mesa de diálogo en la ciudad de Cusco y no en su distrito, tal como habían acordado en la primera reunión desarrollada el pasado 30 de noviembre.
Por este motivo, los 25 dirigentes sociales de Machu Picchu que participaron en la marcha decidieron iniciar una huelga indefinida hasta que se atiendan las demandas de sus bases y de las comunidades campesinas. Los manifestantes anunciaron el bloqueo de la vía férrea e impedirán la circulación de los trenes, lo que afectará a miles de turistas que tenían previsto visitar el santuario histórico durante estos días.
Se estima que 1,116 visitantes se verán perjudicados diariamente mientras dure la medida de fuerza. En los últimos días había crecido la demanda tras el incremento del aforo en Machu Picchu y la ampliación al 100% de la capacidad permitida en el Tren Local, a tal punto que los casi 35 mil boletos de ingreso autorizados para todo el mes de diciembre ya están agotados, según el portal oficial de reservas (www.machupicchu.gob.pe).

HUELGA INDEFINIDA
Óscar Valencia, presidente del Frente de Defensa de los Intereses de Machu Picchu, cuestionó el cambio de sede de la reunión pactada para ayer en su distrito, pero que finalmente se desarrolló en la ciudad de Cusco. Dijo que los pobladores se sienten desairados por las autoridades regionales y del Gobierno nacional.
“Esto genera un malestar no solo para el pueblo de Machu Pichu, porque a eso le llamamos la prepotencia del centralismo de no comunicar (que la reunión sería en Cusco) de no cumplir sus compromisos, quieren hacer una mesa (de diálogo) en Cusco cuando para nosotros es todo un problema trasladarse”, señaló.
Según el dirigente, el compromiso era reunirse en el mismo Machu Picchu para solucionar el pliego de reclamos del servicio ferroviario, a fin de garantizar el viaje de al menos 900 visitantes por día. También se tenía previsto dialogar sobre la regulación de precios de las empesas PeruRail e Inca Rail.
Al respecto, mediante un comunicado, el Gobierno Regional de Cusco aseguró que la reunión no pudo realizarse en Machu Picchu por problemas logísticos advertidos desde los ministerios de Transportes y Comunicaciones (MTC) y de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur).
Por ello, a la mesa de diálogo no asistieron los alcaldes de Machu Picchu y de Santa Teresa; solo estuvieron presentes los viceministros de Turismo, Lyda García, y de Transportes, Paul Caiguaray, el gobernador regional de Cusco, Jean Paul Benavente, algunas autoridades ediles y representantes de Ositran y de los operadores ferroviarios.


SUSPENSIÓN DE TRENES
Debido al paro convocado la noche del miércoles, el concesionario Ferrocarril Trasandino (Fetransa) decidió suspender las operaciones ferroviarias en la ruta a Machu Picchu hasta nuevo aviso, por lo que PeruRail e Inca Rail tuvieron que paralizar sus servicios.
A raíz de esta medida, decenas de turistas nacionales y extranjeros quedaron varados en Cusco y Machu Picchu, tras el anuncio de Fetransa. Medios periodísticos informaron que grupos de visitantes manifestaron su descontento pues la cancelación afectaba sus planes de viajes; algunos de ellos llegaron a las oficinas de PeruRail para exigir solución y la devolución de sus pasajes de tren.
Por la noche, los dirigentes de Machu Picchu acordaron la salida de un último tren hacia Cusco para trasladar a decenas de turistas nacionales varados en su distrito, pero advirtieron que a partir de hoy no se permitirá el ingreso y salida de trenes en la localidad. El anuncio fue respaldado por el alcalde de Machu Picchu, Darwin Baca León.
“Muchos pasajeros, que son del turismo peruano, están aquí y no pueden permanecer más tiempo, están con niños, con todo. Entonces, debemos ser responsables luchadores sociales. Luchar no es afectar a personas que nada tienen que ver con nuestros problemas. Por lo tanto, el acuerdo de los 25 dirigentes es de que ese tren sale esta noche [ayer] y, a partir de ese momento, nadie entra y nadie sale a Machu Picchu”, expresó Óscar Valencia en un discurso público.

*A continuación, el pronunciamiento de la Municipalidad de Machu Picchu en respaldo a los reclamos sociales:

*Este es el comunicado del Gobierno Regional de Cusco sobre la mesa de diálogo en torno a los servicios ferroviarios:
