
La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) ha publicado los resultados del transporte aéreo mundial de pasajeros de enero de 2025, entre los que destacan los siguientes resultados:
- La demanda global, medida en pasajeros-kilómetro transportados (RPK, por sus siglas en inglés), creció un 10,0% interanual en enero de 2025. La capacidad global, medida en asientos-kilómetro ofertados (ASK, por sus siglas en inglés) aumentó un 7,1% interanual. El factor de ocupación se situó en el 82,1%, (+2,2 puntos porcentuales interanual), un máximo histórico para el mes de enero.
- La demanda internacional creció un 12,4% interanual. La capacidad subió un 8,7%, y el factor de ocupación se situó en el 82,6% (+2,7 puntos porcentuales interanual), un máximo histórico para el mes de enero.
- La demanda doméstica aumentó un 6,1% interanual en enero de 2025. La capacidad creció un 4,5% interanual. El factor de ocupación se situó en el 81,2% (+1,2 puntos porcentuales interanual), un máximo histórico para el mes de enero.
“Enero cerró con una notable aceleración de la demanda, especialmente de las aerolíneas basadas en Asia-Pacífico. Los máximos históricos de los factores de ocupación que acompañan esta fuerte demanda nos siguen recordando los persistentes problemas de las cadenas de suministro en el sector aeroespacial”, dijo Willie Walsh, director general de IATA.
“El fuerte crecimiento de la demanda está en consonancia con los resultados de nuestra última encuesta de pasajeros, en noviembre de 2024, en la que el 94% de los viajeros manifestaban que esperaban viajar en los próximos 12 meses más que en años anteriores. Las aerolíneas están respondiendo bien al crecimiento de la demanda, a pesar de las limitaciones de flotas e infraestructura, como se desprende de la encuesta, en la que más del 95% de los pasajeros muestran un nivel de satisfacción superior al 95% y casi el 80% coincide que viajar en avión tiene una buena relación calidad precio, y para los que la capacidad de elegir es un factor fundamental. El 70% prefiere pagar la tarifa más económica y elegir los servicios adicionales que necesiten. Es importante que los reguladores entiendan que la mayoría de los viajeros no quieren verse obligados a pagar por aquellos servicios que no necesitan”, declaró Walsh.