Hoy se desarrolló un paro de 24 horas en la localidad de Ollantaytambo, en Cusco, contra las restricciones impuestas por el Ministerio de Cultura en áreas patrimoniales.
La comunidad local, encabezada por Celestino Ocón, presidente de la comunidad campesina, ha decidido tomar esta medida de fuerza para expresar su descontento y exigir la presencia del titular de esta cartera para brindar soluciones.
Esta decisión fue tomada por diversos sectores de la comunidad al señalar que las limitaciones de la cartera en construcciones en estos espacios perjudican su vida. Además, piden el retiro de las denuncias penales que se han interpuesto contra algunos de los pobladores por presuntas infracciones a estas normativas.
Según reportes periodísticos, más de veinte turistas provenientes de Hungría tuvieron que esperan en los exteriores del parque arqueológico de Ollantaytambo. Otros grupos de visitantes tampoco pudieron acceder al monumento.
Los ciudadanos extranjeros no pueden ingresar al atractivo turístico, debido a que un grupo de aproximadamente 30 personas que participan en un plantón han bloqueado con una pancarta la puerta de ingreso.
Si bien las protestas no han generado el bloqueo de vías, el malestar es para los visitantes que llegaron hasta el parque arqueológico de Ollantaytambo con una agenda planificada, indicó Edison Puma, guía de turismo que acompaña a una delegación de visitantes.
“Nosotros teníamos conocimiento como agencia, pero en el comunicado no especificaron que iban a bloquear el acceso al lugar de visita. Son de Hungría. Tenemos 23 pasajeros. Esperamos la voluntad de la población que nos permita visitar. Sería una pena que vengan desde muy lejos y no lleguen a conocer este hermoso lugar”, manifestó.
En tanto, el dirigente cusqueño de la comunidad de Ollanta, Celestino Ocon, dijo que desde la Dirección Desconcentrada de Cultura Cusco anunciaron que dos funcionarios del Ministerio de Cultura estarán llegando hasta el distrito cusqueño de Ollantaytambo esta tarde para escuchar la plataforma de lucha de los protestantes.
Los manifestantes piden autorizaciones para construir y modificar sus viviendas ubicadas en una zona patrimonial.