Enrique Quiñones, presidente de la Asociación Peruana de Operadores de Turismo Receptivo e Interno (Apotur), saludó que el Ministerio de Salud (Minsa) haya aclarado que el carné de vacunación contra el Covid-19 no será un “requisito obligatorio” para el ingreso de viajeros al país, como sí lo es la prueba molecular PCR tomada con hasta 72 horas de anticipación. Sin embargo, espera que en breve se publique la corrección oficial del Decreto Supremo N° 152-2021-PCM, emitido el viernes pasado.
En comunicación con Turiweb, Quiñones Pareja sostuvo que se debe facilitar la entrada de turistas vacunados con la sola presentación de su certificado de inoculación y una prueba de antígeno, mientras que los pasajeros no vacunados deben contar con una prueba PCR negativa de Covid-19. “Mientras que otros destinos abren las puertas a los vacunados, aquí en Peru se las cerramos. Eso nos resta competitividad”, comentó.
El titular de Apotur expresó su total descontento por la falta coordinación de las autoridades gubernamentales en lo referente a la recuperación del turismo receptivo en Perú. Prueba de ello es la confusión que ha ocasionado en los últimos días el referido decreto supremo, afectando directamente al sector.
Recordó que hace 15 días el gobierno anunció que se liberaba de todo requisito a los vacunados para su ingreso al Perú y que solo a los no vacunados se les iba a pedir la prueba molecular PCR. Por tanto, el reciente dispositivo legal ponía al Perú en desventaja frente a otros países que están abriendo las puertas a los vacunados sin ninguna restricción.
Enrique Quiñones declaró que cada vez que se emite un decreto supremo, se limita el aforo de Machu Picchu al 100% cada 15 días, lo cual genera un gran problema ya que el turista internacional no puede planificar su viaje al Perú. “Por un lado, dicen (desde el gobierno) que desean trabajar con el turismo y por el otro lado, nos ahogan”, acotó.
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