
Autoridades y representantes de Machu Picchu Pueblo han advertido que llevarán a cabo una nueva protesta pacífica si el Gobierno decide anular la venta presencial de 1,000 boletos diarios para ingresar a la ciudadela inca. Argumentan que esta medida afectaría gravemente a la economía local y a los turistas sin acceso a la compra digital.
El alcalde de Machu Picchu Pueblo, Elvis La Torre, se pronunció en contra de la eliminación de la venta presencial, destacando que “esta modalidad permite el acceso a visitantes que llegan sin reservas previas y a quienes no pueden comprar boletos en línea”. Además, advirtió que la decisión podría generar conflictos sociales y afectar el sustento de los trabajadores del turismo en la zona.
Por su parte, Carlos González, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Ollantaytambo, resaltó los problemas que genera la venta presencial de boletos, como largas filas y turistas que pernoctan en la intemperie para obtener una entrada. Enfatizó la necesidad de un sistema de venta más ordenado y eficiente.
Ante esta situación, las autoridades locales han advertido que si se procede con la anulación de los boletos presenciales, se movilizarán en protesta. “Estamos dispuestos a dialogar con el Ministerio de Cultura para encontrar una solución equilibrada, pero si nuestras demandas no son escuchadas, tomaremos medidas de fuerza de manera pacífica”, declaró La Torre.
El Ministerio de Cultura ha informado que está evaluando diferentes opciones para mejorar el acceso a Machu Picchu, buscando un equilibrio entre la preservación del sitio arqueológico y el desarrollo económico de la región.
Se espera que en los próximos días se realicen reuniones entre las partes involucradas para alcanzar un consenso que garantice el acceso equitativo a la ciudadela inca, sin afectar la economía de los habitantes de la zona.