La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) expresó su profunda preocupación por la falta de decisión del gobierno peruano de negociar la eliminación de la Tarifa Unificada de Uso Aeroportuario (TUUA) para los pasajeros en tránsito internacional en el aeropuerto Jorge Chávez.
Recordó que, desde el 7 de diciembre, el concesionario Lima Airport Partners (LAP) viene cobrando US$ 11,88 por pasajero en conexión internacional, una medida que incrementa los costos de viaje entre 3% y 7%, provocando una reducción de la demanda de tránsito de hasta un 11%, lo que pone en riesgo más de 1.000 vuelos anuales.
“No se trata de un ajuste técnico menor, sino de una decisión de política pública con profundas implicancias para el futuro de la aviación en el Perú, su competitividad como hub regional y el sustento de miles de peruanos”, advierte IATA.
Como se sabe, el aeropuerto Jorge Chávez concentra el 99% del tráfico internacional del país y todas las conexiones domésticas. “Su nuevo terminal fue planificado para posicionar a Lima como un hub líder en América Latina, en competencia directa con aeropuertos como Bogotá y Ciudad de Panamá, que han ampliado de forma robusta su conectividad y atraído nuevas aerolíneas”, precisó la asociación.
Sin embargo, sostiene, la TUUA de transferencia mueve al Perú en la dirección contraria. “Los competidores regionales ganarán participación de mercado, ya que aerolíneas y pasajeros optarán por hubs más eficientes en costos”, indica.
Además, asegura que la consecuente pérdida de demanda desalentará a las aerolíneas a programar vuelos adicionales y los actuales en Lima, limitando las oportunidades de conectividad para los viajeros peruanos.
IATA señala que, con la medida, se compromete la competitividad de largo plazo, ya que estudios especializados advierten que la TUUA podría frenar el crecimiento de la aviación peruana durante los próximos 20 años, una preocupación compartida por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur).
“IATA y los actores de la industria han planteado de manera reiterada soluciones y participado activamente en espacios de diálogo, pero el gobierno ha optado por priorizar los intereses del concesionario por encima de la competitividad nacional”, señaló Peter Cerdá, vicepresidente regional de IATA para las Américas.
Agregó que esta decisión “debilita la visión estratégica del Perú y expone al país al riesgo de quedar rezagado frente a sus pares regionales, que actualmente ya cuentan con una ventaja significativa”.
IMPACTO EN EMPLEOS Y PBI EN RIESGO
Según IATA, la aviación es un pilar fundamental de la economía peruana por estas razones:
- 36,100 empleos directos en aviación generan US$ 942,8 millones en producción económica (0,4% del PBI).
- El ecosistema ampliado de la aviación —incluyendo cadenas de suministro, turismo y gasto de los trabajadores— aporta US$ 6,200 millones al PBI y sostiene 364,400 empleos.
- Los visitantes internacionales inyectan US$ 3,500 millones anuales en la economía local.
“Al reducir la conectividad, la TUUA amenaza estos beneficios: Menos vuelos se traducen en menos turistas, menor actividad comercial y menos oportunidades para los peruanos. Las aerolíneas domiciliadas en el país, responsables de la mayor parte del tráfico, se verán especialmente afectadas, lo que podría derivar en más cancelaciones de rutas y pérdida de empleos”, advierte.
“En última instancia, serán los peruanos quienes paguen el costo, con menos opciones, mayores tarifas aéreas y menos empleos, debido a una visión de corto plazo enfocada en beneficios financieros del concesionario, en lugar de una estrategia de largo plazo para fortalecer la conectividad y el futuro económico del Perú”, enfatizó Peter Cerdá.
Frente a ello, IATA insta una vez más a la intervención inmediata de las más altas autoridades del Perú para suspender o revisar la TUUA para pasajeros en tránsito internacional, proteger la competitividad del Perú como hub regional y salvaguardar el empleo y el crecimiento económico para las futuras generaciones.








