La industria aérea global lucha por sobrevivir al duro golpe propinado por la pandemia del coronavirus, con pérdidas estimadas en US$ 39.000 millones en el primer trimestre de 2020, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) que ha solicitado a los gobiernos un apoyo urgente al sector. Solo en Perú, las aerolíneas dejarán de percibir US$ 1.600 millones con una caída de 48% del ingreso anual.
Para las compañías aéreas en general resulta vital el salvataje que puedan ofrecer las entidades públicas y evitar así eventuales quiebras por falta de liquidez. Sin embargo, ante ese escenario, las aerolíneas de bajo costo dicen tener más capacidad y rapidez de reacción para sobrevivir a la crisis en comparación con las aerolíneas tradicionales.
«Las aerolíneas low cost somos más resilientes a las crisis. En JetSmart tenemos una estructura de costos muy eficiente, con poco personal administrativo, con lugares de trabajo accesibles y sueldos con un porcentaje variable. Las aerolíneas más tradicionales tienen más gente, más estructuras, más costos fijos y seguramente se les complica más», señaló Gonzalo Pérez Corral, gerente general de JetSmart en Argentina.
En ello coincide Stephen Rapp, gerente general de Viva Air Perú, quien dijo que las aerolíneas de bajo costo van a fortalecerse durante el proceso de reactivación. «Yo ya lo he visto hace algunos años en Europa, cuando vivimos la crisis provocada por los atentados de 11 de setiembre del 2001. Después de eso, compañías como Vueling, Ryan Air, Easy Jet o Volaris, se consolidaron y crecieron. Y eso ocurre porque somos más ágiles y eficientes, y porque la demanda que va a volver a volar primero será la que exija pasajes ‘low cost’, y de eso se trata nuestro modelo, con tarifas 30% o 40% más baratas», explicó.
Al respecto, José Raúl Vargas, gerente general de Sky Airline Perú, sostuvo: «Pasada esta crisis, las ‘low cost’ tendremos una gran oportunidad para crecer, porque los pasajeros priorizarán el ahorro y los boletos económicos, y ese es el corazón de nuestro modelo: ser muy eficientes y brindar las menores tarifas».
«La crisis ocasionada por el coronavirus ha impactado fuertemente en nuestra industria; solo en Perú, se proyectan pérdidas de US$ 1,300 millones. Sin embargo, como equipo nos mantenemos más unidos que nunca y confiamos que, cuando todo haya pasado, nuestro modelo de precios bajos será más necesario que nunca para que las personas puedan volver a trasladarse de forma rápida y segura», agregó.
Por su parte, Mauricio Sana, gerente comercial de Flybondi Argentina, dijo que a las low cost les beneficia tener una estructura chica. «Si bien el impacto de las crisis afecta a todas las aerolíneas por igual porque los ingresos se redujeron a cero, las low cost tienen más cintura para afrontar las crisis, porque son más eficientes en términos de personal y de costos de la operación. Es más fácil recuperarse y rediseñar itinerarios, porque es una estructura más chica, y es más sencillo reaccionar», comentó.
REINICIO DE VUELOS
Con respecto a la reanudación de operaciones en el mercado peruano, cuando las autoridades lo permitan, Stephen Rapplistos dijo que Viva Air está lista para volver a volar, pero en una primera etapa solo con el 30% de nuestra capacidad.
«Claramente, los vuelos nacionales volverán primero, por el cierre de fronteras a nivel internacional. En cuanto a fechas exactas de retorno es imposible especular, pero sí te puedo decir que este 27 de abril no será. Yo creo que vamos a operar con servicios mínimos por lo menos los tres primeros meses. Vamos a ver cómo reacciona la demanda a nivel doméstico. Podríamos volar en una primera etapa las rutas troncales, como Cusco, Arequipa, Iquitos y Piura, aunque no en todos los horarios», declaró el ejecutivo al diario El Comercio.
En tanto, José Raúl Vargas dijo que en el mes de mayo, considerando las medidas de distanciamiento social, será difícil que Sky vuelva a operar al 100% de su capacidad. No obstante, adelantó que cuentan con un plan de retorno en cuanto a rutas y frecuencias: «De hecho, retornaremos con un itinerario reducido, priorizando las ciudades con mayor tráfico, sobre la base de aquellas a donde podamos volar».
Finalmente, los ejecutivos ratificaron la necesidad de que el Gobierno disponga un plan de salvataje que ayude a la industria aerocomercial a mitigar los efectos de la crisis y a despegar lo más pronto posible. También dijeron que los planes de expansión de ambas compañías aéreas podrían retomarse en 2021.
