A dos años de vigencia de la Ley N° 31556, que redujo el pago del Impuesto General a la Ventas (IGV) de 18% a 8% para las micro y pequeñas empresas dedicadas a las actividades de restaurantes, hoteles y alojamientos, se debate el real impacto de esta medida.
Para las empresas del sector, la ley ha sido beneficiosa pues permitió la reactivación del rubro hotelero y gastronómico luego del duro golpe de la pandemia. Incluso, desde la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines (Ahora Perú) se habla de solicitar la extensión del beneficio tributario ya que la vigencia de la norma vence el 31 de diciembre de este año.
No obstante, para el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y la Sunat la referida ley ha provocado menores ingresos para el Estado, provenientes de la recaudación del IGV en los años 2022, 2023 y este 2024. Se habla de unos S/ 1400 millones.
Un informe del portal Ojo Público, señala que el país deja de percibir solo por esta medida por lo menos S/ 1.409 millones y se beneficia a alrededor de 28.000 empresas.
Según las cifras publicadas por Sunat, entre septiembre y diciembre de 2022, el costo fiscal de la ley 31556 fue de S/ 221,7 millones. Mientras que para todo el 2023 el impacto de la norma fue de S/ 742,9 millones, superior a la proyección anual prevista.
En tanto, para este 2024, el MEF calcula que dicha norma reducirá los ingresos tributarios del país en S/ 445 millones. Sin embargo, esta cifra podría ser mayor, ya que el cálculo se realizó antes de que la Sunat publique el resultado del impacto real del año 2023.
“Esa es una de las medidas que podría haber tenido sentido en el año 2021, cuando estábamos saliendo de la pandemia y de las restricciones impuestas. Pero, en 2022 y que esté vigente en este momento, yo no lo entiendo”, afirmó Roxana Barrantes, economista, investigadora del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) y profesora principal de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
Pero, más allá del impacto tributario, cabe recordar que la Ley N° 31556 tuvo y tiene por finalidad rescatar el empleo en las micro y pequeñas empresas dedicadas a ambos rubros. ¿Se logró el objetivo? Este tema no está del todo claro.
No obstante, lo que sí queda claro es que hubo una reactivación. Según el Instituto Nacional de Estadísticas e Informática (INEI), el sector Alojamiento y Restaurantes registró en el año 2023 un aumento de 2,68%, como resultado del incremento de la actividad del subsector Restaurantes en 2,56% y del subsector Alojamiento en 4,86%.
En lo que va del presente año, el sector Alojamiento y Restaurantes registró un crecimiento de 2,08% entre enero y junio. Esta cifra fue mayor en junio, cuando el sector presentó una variación de 4,66%, por el dinamismo de la actividad del subsector Restaurantes en 4,67% y del subsector Alojamiento en 4,44%.
En conclusión, este tema debe ser analizado con mayor profundidad tanto por las entidades del sector público como el privado, para determinar si amerita o no una ampliación de la reducción del IGV a los hoteles y restaurantes.
