El Poder Ejecutivo aprobó la primera Política Nacional de Cultura en la historia del Perú, que orientará e integrará durante los próximos diez años la intervención del Estado en materia cultural, con el propósito de generar las condiciones para el adecuado ejercicio de los derechos culturales de los peruanos y peruanas, así lo dio a conocer el ministro de Cultura, Alejandro Neyra.
Explicó que este documento, publicado al cumplirse diez años de creación del Ministerio de Cultura y que se articulará con las políticas nacionales de otros sectores, contribuirá, además, a “posicionar a la cultura como un elemento fundamental para fortalecer la democracia e impulsar el desarrollo del país, para lograr el Perú que queremos”.
En efecto, señaló que la Política Nacional de Cultura impactará en la igualdad, apostando por la afirmación de la interculturalidad y la diversidad, y promoviendo un país libre de discriminación; y, además, en la recuperación y crecimiento de la economía, a través de la generación de empleo, productividad y competitividad en el país.
En ese contexto, el ministro Neyra precisó que la Política Nacional de Cultura persigue, entre sus principales objetivos, fortalecer la valoración de la diversidad cultural, incrementar la participación en las expresiones artístico-culturales, y desarrollar de manera sostenible las artes e industrias culturales del Perú.
Agregó que también se fortalecerá la valoración del patrimonio cultural, así como su protección y salvaguardia para su uso social, y se garantizará la sostenibilidad de la gobernanza cultural.
Por eso, afirmó que la reciente política de Estado actúa como una brújula, describe un horizonte y marca un camino para el desarrollo de la cultura en el país y favorecerá, a través de la prestación de diversos servicios públicos, al ejercicio pleno de derechos culturales tales como el derecho a la identidad cultural, a la educación y formación cultural, a la información y comunicación, al patrimonio cultural, a las expresiones culturales, a la creación y cooperación cultural, en concordancia con lo establecido en la Constitución.
No obstante, el titular de la cartera de Cultura remarcó que, para lograr resultados óptimos, se debe efectuar el fortalecimiento institucional del ministerio, lo que significará realizar, al Bicentenario, una serie de transformaciones con el propósito de contar con una organización moderna, eficiente, transparente y responsable en el gasto público, y que asuma la rectoría de las políticas culturales, articule efectivamente con otros sectores, niveles de gobierno y agentes culturales, y preste servicios de manera eficiente a los ciudadanos y ciudadanas del Perú.
Finalmente, acotó que la Política Nacional de Cultura acoge las reflexiones y desafíos que nos plantea el Bicentenario y será de cumplimiento obligatorio para todos los niveles de gobierno durante los próximos diez años.