Los sectores gubernamentales de Cultura de los países miembros de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) consiguieron la aprobación de la DECISIÓN 861, norma con la que se instauran mejoras en la gestión de la salvaguarda de la integridad y no circulación ilícita de los bienes del Patrimonio Cultural de Colombia, Ecuador, Bolivia y Perú.
Este importante acuerdo, que deroga la DECISIÓN 588 del año 2004, se realizó durante la cuadragésima sexta Reunión del Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores, en la que los países que conforman la CAN estuvieron representados por sus cancilleres.
Con esta acertada medida, se acrecienta la obligación del poseedor del bien cultural a acreditar ante cualquier autoridad competente la legalidad de su titularidad respecto al bien.
También se sistematizan los compromisos de los países miembros para la recuperación, restitución y/o devolución de los bienes culturales a su país de origen.
Por otro lado, se incorpora como Anexo 1-, la categoría de “Bienes del Patrimonio Cultural sujetos a control”, establecida en armonía con la Nomenclatura Común de los países miembros de la CAN, elaborada para facilitar a las autoridades de control aduanero, el reconocimiento de estos bienes con el uso de un lenguaje aduanero común.
Asimismo, se definen por primera vez importantes términos relacionados a la protección de bienes culturales, como “restitución”, “recuperación” y “devolución”.
De otro lado, se ha establecido que el Comité Andino de Asuntos Culturales se reunirá al menos una vez por año, para garantizar una comunicación permanente que optimizará la cooperación mutua en materia de recuperación de los bienes del Patrimonio Cultural.
Es importante destacar que esta actualización de la normativa, que fortalece la política multilateral sobre recuperación de bienes culturales, fue solicitada por la Dirección de Recuperaciones –órgano de línea de la Dirección General de Defensa del Patrimonio del Ministerio de Cultura del Perú.
La DECISIÓN 861 fue publicada en la Gaceta Oficial del Acuerdo de Cartagena, y da cuenta de la formalización de este significativo progreso en los esfuerzos mancomunados por preservar el valioso legado de la subregión, y del rol de liderazgo que ejerce el Ministerio de Cultura en el perfeccionamiento de la legalidad internacional sobre el tema.
