Machu Picchu: reforzarán medidas de control para evitar nuevos casos de ingreso ilegal

La Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco y la Jefatura del Parque Arqueológico de Machu Picchu anunciaron que reforzarán los procedimientos de supervisión y control de la seguridad para evitar que vuelva a ocurrir el ingreso ilegal de visitantes a la ciudadela inca y/o el acceso a circuitos no autorizados.

Entre las medidas que se adoptarán destacan la intensificación de las acciones de control inopinado del personal encargado de la vigilancia del parque arqueológico, a fin de que no se repita el lamentable caso del servidor intervenido, el pasado 18 de enero, por haber recibido una coima de 100 soles para permitir el acceso de un turista al circuito N° 3 de la ciudadela inca o llaqta cuando solo contaba con boleto para transitar por el circuito N° 1.

Así lo adelantó Jorge Luis Moya Coháguila, titular de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Cusco, quien señaló que dicha entidad, en representación del Ministerio de Cultura, denunció al vigilante intervenido por un asistente de conservación del parque arqueológico, ante la Comisaría de Machu Picchu y ante la Fiscalía Mixta Distrital de Machu Picchu.

“El hecho, registrado al mediodía del sábado 18 de enero último, constituye la presunta comisión de Delito contra la Administración Pública, en la modalidad de Corrupción de funcionarios, en agravio del Estado”, aseveró el funcionario en entrevista exclusiva con la agencia Andina.

Indicó que este caso fue investigado por la Fiscalía Provincial Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Cusco, cuyo segundo despacho, dirigido por la fiscal Gladys Victoria Aparicio Aragón, presentó las pruebas que sustentaron la acusación.

“Tras aceptar su responsabilidad penal por el delito de cohecho pasivo propio y acogerse al mecanismo de terminación anticipada, el vigilante del parque arqueológico de Machu Picchu fue sentenciado a cinco años de prisión. Esta sentencia en tiempo récord fue posible gracias a la Unidad de Flagrancia instaurada el año pasado por el Poder Judicial”, detalló Moya.

Añadió que el turista que sobornó al vigilante también fue condenado a una pena de tres años y cuatro meses de pena privativa de la libertad suspendida, además del pago de una reparación civil de 2,000 soles.

Sin embargo, por haberse acogido ambos procesados al mecanismo de terminación anticipada, el Poder Judicial dispuso que la condena de cinco años impuesta al vigilante de Machu Picchu no se efectivice, sino que sea cambiada por 260 jornadas de prestación de servicios a la comunidad y una reparación civil de 3,000 soles. La ejecución de esta sentencia corresponde al Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), precisó Moya Coháguila.

Algo similar ocurrió con el turista, cuya condena fue conmutada por el pago de una multa de 6,300 soles.

Moya Coháguila refirió que, en el ámbito administrativo, el vigilante -quien venía trabajando entre siete y ocho años en ese puesto- fue sometido a un proceso disciplinario que determinó su separación definitiva de la DDC Cusco e inhabilitación para ejercer cargos públicos.


Read Previous

Cenfotur ofrece descuento del 50% en la mensualidad para sus carreras de Turismo y Gastronomía

Read Next

Cancillería intensifica esfuerzos en favor de peruanos ante políticas migratorias de EEUU