La llegada de turistas a la ciudadela inca de Machu Picchu aún no logra recuperar los niveles registrados antes de la pandemia. Entre enero y octubre de 2025 se contabilizaron 1,332,868 visitantes, cifra que está por debajo de lo registrado en similar periodo de 2019, cuando se reportaron 1,360,591 turistas.
El análisis por tipo de visitante muestra que la recuperación ha sido desigual. Según cifras del Ministerio de Cultura, el turismo receptivo alcanzó los 1,040,487 turistas extranjeros en los diez primeros meses del presente año, lo que equivale al 99.1% de los registros de 2019 (1,049,482).
En cambio, el turismo nacional sumó 292,381 visitantes, lo que representa una caída del 6% frente a los 311,109 turistas nacionales recibidos en el periodo enero-octubre de 2019.
Esta brecha evidencia que, si bien el mercado internacional ha mostrado una sólida recuperación, aún persisten desafíos para estimular el turismo interno hacia el principal atractivo turístico del país.
EVOLUCIÓN POSPANDEMIA
Luego del cierre total de Machu Picchu durante la pandemia del Covid-19 y la lenta reactivación inicial, el flujo de visitantes ha mostrado una evolución desigual en los últimos cuatro años, marcada por altibajos y una fuerte recuperación reciente.
En 2021, el santuario recibió 461,120 visitantes, principalmente turistas nacionales (66% del total), en un contexto de restricciones sanitarias, limitados vuelos internacionales y control de aforos. Fue el primer año completo de operaciones tras la emergencia sanitaria.
Al año siguiente, en 2022, se consolidó la reactivación con 1,038,584 turistas, más del doble que el año anterior. El crecimiento fue liderado por el turismo receptivo, que representó más del 68% del total.
No obstante, en 2023 se registró un retroceso. Las llegadas cayeron a 955,741 visitantes, una baja del 8% respecto a 2022. Esta disminución estuvo asociada a factores sociales y logísticos, incluyendo conflictos y paros en la región Cusco, que afectaron el acceso al sitio.
El verdadero repunte llegó en 2024. Ese año, Machu Picchu recibió 1,508,300 visitantes, muy cerca incluso de las cifras prepandemia (1,585,262 en 2019). El crecimiento fue impulsado principalmente por el turismo internacional, con 1,149,478 extranjeros, lo que representó el 76% del total anual.
Esta evolución evidencia que, si bien la recuperación ha sido progresiva y a veces irregular, Machu Picchu sigue consolidándose como uno de los destinos más atractivos de América Latina. Las cifras de 2025 hasta octubre confirman esta tendencia, aunque aún falta recuperar por completo el volumen de turistas nacionales. En general, podríamos cerrar el año bordeando los niveles de 2019.
*A continuación, el comparativo de 2019 vs. 2025 en llegada de turistas a Machu Picchu:









