
Juan José Salmón, gerente general de Lima Airport Partners (LAP), informó que ayer culminaron todas las pruebas integrales de cara al próximo inicio de operaciones del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
“Se tuvo, además, un simulacro de sismo, en el que evacuamos a más de 2,300 pasajeros y a todos los funcionarios públicos que laborarán en las instalaciones”, comentó.
Asimismo, el martes pasado, se realizaron las pruebas nocturnas. “También se han simulado 380 vuelos, con 13,000 pasajeros y procesado más de 22,000 equipajes. Para llevar a cabo esta magnitud de ensayos, capacitamos a más de 40,000 personas. Todo esto para tener seguridad en la operación, lo cual no es negociable”, afirmó.
El ejecutivo destacó que LAP ha logrado montar una infraestructura de primer nivel en poco más de tres años. “Esto es un hito para el país. Estamos a la espera de los últimos permisos para la planta de combustible, lo cual estamos trabajando de la mano con especialistas de Osinergmín y PCM”, refirió.

En declaraciones a RPP, Salmón se refirió al traslado del antiguo al nuevo terminal aéreo, indicando que este podría realizarse de una manera “más controlada”.
“Yo entiendo que hay mucha angustia por operar porque es mudarse a una nueva casa, es un nuevo diseño, una nueva ubicación, pero hay soluciones para eso. Se puede comenzar con una operación más controlada a través de un inicio de operación más pequeña, pero muy pronto irla escalando, es algo que se puede hacer. También lo hemos propuesto en su momento. Estamos abiertos a cualquier tipo de alternativa”, explicó.
A pesar de este planteamiento, el gerente de LAP aseguró que, en cuanto a infraestructura, el nuevo terminal está listo para operar.
“Lo único que puede estar en este momento pendiente, estamos pendiente de los últimos permisos de la planta de combustible para poder operar. Estamos trabajando de la mano con los buenos profesionales de Osinergim, con el apoyo de la oficina PCM y el operador de la planta de combustible es la empresa Exolum”, explicó
Adicionalmente, se mencionó la refacción de la pista actual y el cambio total del sistema de luces, trabajos que comenzarían a mediados de abril.
“Eso supone que solo se podría postergar hasta mediados de abril la inauguración del nuevo terminal si es que el Ministerio decide postergar. Recordar que tenemos dos pistas: podríamos siempre operar en una mientras la otra en entra reparación. Esto sugiere que, incluso si la inauguración se mantiene para el 30 de marzo, la operación podría verse inicialmente limitada debido a estos trabajos en la pista antigua”, refirió Salmón.
En respuesta a lo planteado por LAP, Carlos Gutiérrez, representante de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI), indicó a RPP que esta propuesta ya había sido discutida y descartada en una reunión el 15 de enero, cuando se postergó el inicio al 30 de marzo.
Según Gutiérrez, un inicio gradual no es viable debido a la redundancia de recursos que implicaría para el Estado, las aerolíneas y los proveedores de servicios. Explicó que mantener en operación tanto el nuevo como el actual terminal generaría costos innecesarios para todos los involucrados.