
Directo al grano. El sector privado, en coordinación con las nuevas autoridades gubernamentales, emprenderá una dura tarea en recuperar el sitial que el Perú ostentaba turísticamente, afirma Enrique Quiñones, presidente de la Asociación Peruana de Turismo Receptivo e Interno (Apotur).
Sostiene que las actuales cifras que deja la anterior administración son el fiel reflejo de la total desconfianza de la inseguridad existente en nuestro país y las cancelaciones de las reservas para los siguientes dos a tres meses de 2023. Responsabiliza al entonces titular del Mincetur, Roberto Sánchez Palomino, y a la ex directora de Turismo Receptivo de PromPerú, Rosa Béjar, por la debacle de la actividad turística.
En diálogo con Turiweb, el titular de Apotur da a conocer un balance del turismo receptivo en nuestro país y perspectivas para el presente año. También habla sobre la gestión del actual ministro Luis Fernando Helguero y de la nueva viceministra de Turismo, Madeleine Burns. A continuación, sus declaraciones.
Por: Carlos Chuquín, analista.
– ¿Se puede considerar el 2022 un año desastroso para el turismo receptivo en nuestro país?
– Fue un año que se salió de cero. Fue una sensación de aire de respiro, pero el turismo receptivo ha crecido a lo que buenamente lo turistas han querido llegar al Perú y no por el esfuerzo de las autoridades gubernamentales.
Ha habido cero campañas promoción del turismo receptivo en el exterior. No se ha apoyado en ese sentido para que el sector crezca. Todo lo contrario, sí era posible que se reduzca. Eso se traduce en cifras porcentuales de menos del 50% del total de turistas que teníamos antes de la pandemia del Covid-19.
– ¿Quién es el responsable directo de esta debacle?
– No solamente del turismo receptivo, sino de toda la actividad turística. [El responsable fue] Roberto Sánchez Palomino. Fue una persona netamente política y no un gestor técnico.
– Si hablamos de cifras, ¿qué cifras maneja Apotur sobre la llegada de turistas a nuestro país?
– Debemos estar en un millón 900 mil turistas al concluir el 2022. Esta cifra ha sido más baja de lo que se esperaba. El Perú es uno de los países dentro de la región con menor crecimiento en lo referente al turismo receptivo.
Por ejemplo, Chile que ha sido uno de los países que tuvo más restricciones en el turismo y una vez abiertas sus puertas inició una fuerte campaña de promoción en los principales mercados, en los cuales el Perú lamentablemente estuvo ausente.
– ¿Es responsabilidad directa y total de PromPerú?
– Es responsabilidad absoluta del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), ya que conduce todas las estrategias y, obviamente, de PromPerú, donde estuvo una persona que no tenía mayor conocimiento de lo que era turismo y mucho menos de turismo receptivo.
– Para ser directo, ¿a qué persona se refiere?
– A Rosa Béjar (ex directora de Turismo Receptivo de PromPerú). Posiblemente haya sido una persona honesta, pero con ausencia de conocimiento del sector y que fue contratada por el ex ministro Roberto Sánchez.
FUERTE CAMPAÑA EN EL EXTERIOR
– Con este panorama desolador, ¿ves difícil que en 2023 se recupere el turismo receptivo, con el agregado de que varios países han recomendado a sus connacionales a no viajara al Perú?
– La situación política suscitada a finales de 2022 deterioró el sector, pero creo en su recuperación. Mientras las aerolíneas no dejen de volar al Perú, habrá esperanzas para que los turistas siempre arriben a nuestro país.
– Definitivamente, se tendrá que hacer una fuerte campaña de promoción en el exterior, ¿Cuáles serían los primeros pasos a dar?
– Tenemos que hacer una fuerte campaña de posicionamiento del Perú como un destino confiable, teniendo en cuenta que ha sido el único país de la región que ha sufrido estas manifestaciones violentas.
– El nuevo titular de Mincetur estimó que, en 2023, se llegará a la cifra de 3 millones de turistas internacionales. ¿Es factible esa cifra?
– Será una situación diferente. Habrá muchas rutas aéreas restituidas, las fronteras estarán completamente abiertas y esperemos que se pueda llegar a los 3 millones de visitantes.
Sin embargo, nuestro techo es 4.9 millones de turistas y esa cifra recién la podríamos alcanzar en el año 2024. Hay mercados del Asia que todavía están cerrados, como son los casos de China, Japón y Corea del Sur.
En Apotur, nos guiamos por el número total de visitantes que llegan a Machu Picchu y comprobar a los que son verdaderos turistas. También hay viajeros que solamente llegan a Tumbes. Iquitos o Lima, pero en mayor medida un viajero que llega al Perú, principalmente va a Machu Picchu.
– El economista Miguel Palomino manifestó que aún no hemos pagado por los errores que el anterior gobierno ha cometido y que el turismo sería el más castigado. ¿Está de acuerdo con esa afirmación?
– Todo dependerá de las fortalezas que tenemos. El ministro Luis Helguero se ha mostrado abierto a todas las asociaciones a que podamos brindar nuestra opinión, lo cual en el año y medio que estuvo Roberto Sánchez como ministro, nunca fuimos convocados.
– ¿Ya se han reunido con el ministro Huelguero?
– Sí, a través de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) y tenemos una mesa de trabajo en donde analizamos todos lo acontecido en el sector y promoción del país en el exterior.
Al respecto, hay una intención inmediata de resolver el tema. Nuestras opiniones o planteamientos podrían estar equivocadas, pero al menos, nos escuchan para luego tener conocimiento de lo que están haciendo a fin de construir un escenario de crecimiento.
– ¿Será FITUR el primer escenario en que se haría una fuerte campaña de promoción de nuestro país como destino turístico?
– A nivel internacional, tenemos la feria de FITUR programada para el próximo 18 de enero y esperemos llegar con un país relativamente en paz, para que la comunicación en esta feria internacional que asisten agencias de todo el mundo sea efectiva y podamos manifestar que el Perú está en condiciones de ser visitado.
– ¿A cuánto arroja las pérdidas económicas para el turismo, el bloqueo de carreteras en todo el país?
– Solamente en el mes de diciembre 2022 y quizás parte de enero del presente año, las pérdidas ascenderían a unos 300 millones de dólares. Un turista extranjero genera mil 500 dólares, mientras que el turista nacional solamente genera 500 dólares.
– Finalmente, ¿qué comentario te merece la designación de Madeleine Burns como viceministra de turismo?
– Es una persona con la que hemos trabajado anteriormente, estando ella en el Centro de Formación Turística (Cenfotur). Es una profesional bastante capaz. Es una profesional más técnica que política. Ella nos conoce y no hay que explicarle nada. Simplemente, hay que ponernos a trabajar inmediatamente.