
La Asociación Peruana de Operadores de Turismo Receptivo e Interno (Apotur) expresó su preocupación por la reciente declaración del Estado de Emergencia en Lima y Callao, medida adoptada por el Gobierno para enfrentar la inseguridad ciudadana.
A través de un comunicado oficial, el gremio turístico calificó la decisión como «insuficiente» y advirtió sobre su impacto negativo en la imagen del país como destino turístico.
“Esta no es la primera vez que se adopta una medida de esta naturaleza. Experiencias previas han demostrado que dichas acciones no han generado resultados efectivos en el pasado”, señaló Apotur en su pronunciamiento.
Asimismo, la asociación alertó sobre las repercusiones que este tipo de anuncios generan en el sector turismo, señalando que ya se han recibido consultas y preocupaciones de clientes internacionales. “Esto podría derivar en la cancelación de reservas de turistas extranjeros que tenían planeado visitar nuestro país”, precisó.
En ese contexto, Apotur exhortó a la Presidencia del Consejo de Ministros a implementar estrategias de seguridad más efectivas y sostenibles, basadas en inteligencia y prevención del delito. «Creemos firmemente que los problemas de inseguridad no se resuelven únicamente con armas, sino con acciones estructurales e integrales», enfatizó.
Entre las propuestas planteadas, el gremio turístico sugirió fortalecer los sistemas de vigilancia y análisis criminal mediante tecnologías modernas, capacitar a las fuerzas del orden en técnicas de inteligencia y estrategias preventivas, así como promover programas sociales y educativos que contribuyan a reducir los factores que propician la delincuencia.
“Estas acciones son esenciales no solo para garantizar la seguridad de los ciudadanos y visitantes extranjeros, sino también para proteger y mejorar la reputación del Perú como un destino turístico confiable y atractivo”, sostuvo la asociación.
Finalmente, Apotur instó al Gobierno a comprometerse con un enfoque integral para enfrentar la crisis de inseguridad y generar confianza tanto en la población como en los turistas que visitan el país.