En las últimas semanas se ha hablado mucho sobre la crisis que ha originado el coronavirus Covid-19 en los hoteles, agencias de viajes, operadores de turismo, restaurantes y líneas aéreas, pero poco o nada se ha dicho sobre el transporte turístico que también sufre los embates de la pandemia.
Turiweb conversó con Alexander Funcke, presidente de la Asociación Peruana de Transporte Turístico (Apttur), quien advirtió que el 98% de las empresas que prestan este servicio a nivel nacional están prácticamente paradas por la caída del turismo. El impacto económico se traduce en pérdidas por más de US$ 100 millones en ingresos y más de 50 mil puestos de trabajo en riesgo.
“Actualmente, nuestro trabajo es cero, estamos al 98% parados. Lo que ahorita tenemos son evacuaciones de pasajeros extranjeros varados en algún sitio del Perú y, en menor medida, hemos podido insertarnos al transporte de personal debido a que se han requerido mayor número de unidades, pero en este caso tenemos restricciones para operar”, comentó.
Sobre este último punto, explicó que la nueva Ley de Transporte Turístico, aprobada a fines de 2019, fue positiva para regular la actividad y evitar la informalidad, pero hoy en día es un factor que los limita a prestar otro tipo de servicios alternativos para enfrentar la actual coyuntura, como el transporte de personal o de pasajeros en general. Por ello, solicitan la suspensión temporal de la norma y de la Placa Turística de color morado.
“Tenemos una Ley de Transporte Turístico que es la 026-2019 que salió en agosto del año pasado, que si bien trataba de organizar el servicio lo que está haciendo en este momento es perjudicarnos debido a que nos enfrasca a trabajar solamente en turismo, estamos totalmente limitados. Si mañana sale la ATU o el MTC a hacer una fiscalización, obviamente los primeros perjudicados vamos a ser nosotros porque no podemos hacer ningún servicio provincial, interprovincial, personal ni escolar”, explicó Funcke.
Adicionalmente, dijo que la norma obliga a las empresas de transporte turístico a adecuar sus unidades a nuevas especificaciones técnicas, muchas de las cuales no vienen de fábrica, lo que implica asumir un sobrecosto significativo adicional. “No es solo cambiar dos cosas, a veces es cambiar todos los asientos. Estamos hablando que en unidades pequeñas el gasto puede ser de 3 mil a 4 mil dólares, y en unidades grandes de 10 mil a 15 mil dólares por cada vehículo”, refirió.
MEDIDAS URGENTES
Por ello, el gremio viene solicitando ayuda al gobierno porque esta situación los ha dejado totalmente paralizados. Entre las medidas requeridas figuran:
- Eliminación o suspensión por un periodo de 18 meses del Decreto Supremo 026-2019-MTC, que tiene un impacto económico considerable en la adecuación de las unidades de transporte turístico.
- Subvención de sueldos a un 60% en toda la planilla, debido a que son varios los trabajadores que ganan más de S/ 1,500 mensuales.
- Habilitar a las empresas de transporte turístico a realizar otras modalidades del servicio, como transporte de personal y transporte provincial o interprovincial en rutas cortas; por ejemplo: Lima, Mala, Cañete, Chincha, Ica, Huaral, Huacho, Barranca, etc. (300 Km hacia el sur y hacia el norte). Esto debido a que el transporte turístico cumple con algunas exigencias que son más rigurosas que las anteriormente mencionadas.
- Subvención en los combustibles.
- Suspensión y exoneración del pago del IGV en los siguientes 18 meses.
- Emisión de Revisiones Técnicas solo una vez al año, en lugar de cada 6 meses.
- Devolución del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC).
- Bajar los precios del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) y seguros vehiculares.
- Leyes de contratación de personal más flexibles.
- Excepción en las leyes y reglamentos de contrataciones excepcionales para poder ajustar las planillas a la realidad, sin necesidad de hacer grandes desembolsos de dinero por despidos (terminación por causas ajenas a la voluntad de ambas partes).
- Eliminación o suspensión de la Placa Morada (placa turística) que los limita a realizar solo transporte turístico.
- Suspensión de gratificaciones y CTS por un periodo de 18 meses.
- Ampliar la vida útil de los vehículos de 15 a 20 años.
Cabe señalar que Apttur ha enviado este pliego de propuestas de salvataje tanto al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) como al Ministerio de Transportes (MTC) y a la Sunat. “Ahorita la prioridad es salvaguardar a las empresas y, en la medida de lo posible, salvaguardar al personal que está detrás nuestro y esperar a que se abran las fronteras que han dicho que es lo último que se va a hacer. Estamos preocupados”, manifestó Alexander Funcke.
“Esta crisis ha afectado al 100% de nuestros negocios al igual que el de otros sectores turísticos y, en consecuencia, si no recibimos ayudas inmediatas en el sector financiero, laboral y político, las cuales aplaquen esta situación, nuestro sector se va a ver en la obligación de reducirse a la mínima expresión y en muchísimos casos las empresas van a quebrar y cerrar, generando un despido masivo y desequilibrio en las canastas de muchísimas familias que se encuentran involucradas en este rubro, como: choferes, mecánicos, personal de oficina y otros, además de todos los negocios colaterales que de alguna manera están involucrados como son la venta de combustible, repuestos, carroceros, etc.”, puntualizó.