María del Carmen de Reparaz, destacada profesional de amplia trayectoria en el sector turismo, fue nombrada por el presidente de la República, Manuel Merino, como nueva ministra de Cultura del Gabinete liderado por Ántero Flores-Aráoz. Su juramentación al cargo se produjo ayer en Palacio de Gobierno.
La flamante titular de Cultura es licenciada en Turismo y Hotelería, cursó estudios de Historia y una Maestría en Gestión Cultural y Turismo. Tiene amplia experiencia en gestión pública, en planeamiento y desarrollo de actividades vinculadas a los diferentes niveles de gobierno, del sector privado y en el campo internacional, liderando grupos de trabajo en los últimos 13 años en el sector turismo de manera ininterrumpida.
De Reparaz se desempeñó como viceministra de Turismo, desde agosto del 2014 a setiembre del 2016, durante el gobierno del ex presidente Ollanta Humala. Anteriormente, ocupó diferentes posiciones en la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (PromPerú) del 2003 al 2011.
Como directora de Turismo de PromPerú, impulsó y promovió el turismo interno, mediante estrategias coordinadas con el sector público y privado además de continuar liderando las estrategias de comercialización y promoción en el exterior que permitieron generar un mayor ingreso de turistas y divisas al Perú.
Previo a su designación como titular del Ministerio de Cultura, De Reparaz trabajó como directora de Turismo Cuida, asociación sin fines de lucro, comprometida con el desarrollo de un turismo sostenible y responsable. Ha estado dedicada a la recuperación, conservación y puesta en valor del patrimonio cultural peruano.
También formó parte del consejo consultivo del Museo Pedro de Osma de Barranco, del consejo consultivo de la asociación Ayuda en Acción (ONG española) y del comité consultivo de la carrera de Turismo y Hotelería de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
¿QUÉ RETOS LE ESPERAN?
En esta nueva etapa dentro de la administración pública, Maricarmen de Reparaz tendrá la responsabilidad de dirigir el Ministerio de Cultura en la corta etapa de transición y sentar las bases para una adecuada transferencia al nuevo gobierno. En estos ocho meses de gestión le esperan grandes retos dentro de un sector convulsionado por la serie de irregularidades denunciadas en los últimos meses.
Desde el sector turismo se ha apoyado su designación por su conocimiento de la industria y su cercanía con los representantes públicos y privados de la actividad turística, especialmente con la nueva ministra de Comercio Exterior y Turismo, Mara Seminario, cuya relación data de cuando trabajaron juntas en el Mincetur.
Además, por sus años de experiencia en el sector turismo, Maricarmen de Reparaz conoce la importancia que tiene esta actividad como motor de desarrollo económico y social al interior del país. Por tanto, existe la confianza de que habrá un mejor entendimiento entre los sectores cultura y turismo para reforzar el trabajo en conjunto en pro de la inversión en los destinos nacionales y la revalorización de sus atractivos, alineando las políticas de protección, conservación y operación turística del patrimonio histórico del Perú.
RETOS EN CULTURA
Por otra parte, Maricarmen de Reparaz tendrá la difícil tarea de resolver los problemas que aquejan al sector que ahora representa, en sus distintas instancias y competencias en temas de patrimonio cultural, industrias culturales, interculturalidad, actividades artísticas y un largo etcétera.
En comunicación con Turiweb, especialistas del sector cultura enumeraron las principales necesidades del rubro y lo que esperan de su nueva ministra. Aquí el resumen:
- Se requiere una auditoria y reingeniería del Ministerio de Cultura (Mincul). Revisar las áreas que no están funcionando ni dando resultados pues no se ha visto un real trabajo cultural. Tampoco no se ve, de forma tangible, resultados en la promoción de las industrias culturales ni el patrimonio.
- Las contrataciones CAS y las órdenes de servicio del Mincul están completamente desprestigiadas, por las denuncias de corrupción. Los concursos suelen ser irregulares, prevalece el ‘amiguismo’ y no existe la meritocracia; prueba de ello son los casos Richard Swing y los premios Estímulos, ambos vienen siendo investigados por la Contraloría.
- En el caso de la ayuda Covid-19, otorgada por la gestión anterior, la Contraloría está investigando el mal manejo de los jurados que se auto-premiaron; por ejemplo, en la categoría Editoriales. No hay una respuesta clara sobre cómo fueron los criterios de selección.
- El Mincul no brinda ayuda real a los artistas, no permite brindar espacios para realizar actividades culturales a los artistas, salvo algunas actividades. El Museo de la Nación está abandonado.
- El centralismo del Mincul perjudica a las sedes descentralizadas. El patrimonio está abandonado en diversas regiones, no se brinda presupuesto y no se crean políticas ni acciones culturales concretas para su promoción como bien cultural y turístico.
- Las editoriales independientes están dejadas de lado, así como las industrias culturales. No se promueven alianzas con el sector privado para apoyar y financiar publicaciones, no hay políticas que generen mecenazgo ni subvenciones.
- No se utiliza la página web ni los canales de Youtube del Mincul, para dar a conocer la historia o la cultura a diferentes tipos de públicos. El conocimiento cultural no llega a las personas, pese a que hay medios para lograrlo.
- Se debería brindar los espacio vacíos del Mincul para que todos los artistas, gestores culturales e investigadores puedan realizar actividades, promover su trabajo y crear públicos. El Museo de la Nación debería ser la casa de todos los artistas, pero está abandonado.
- Promover proyectos de educación creativos como museos itinerantes, libros y videojuegos que promuevan los temas culturales, literarios y de patrimonio.
- Que los premios Estímulos puedan considerar también el apoyo a la investigación cultural y la historia del arte. No se promueve la investigación cultural.