En el marco de las celebraciones por el 486 aniversario de la ciudad capital, la Municipalidad Metropolitana de Lima anunció el pronto reinicio de los circuitos turísticos por el Centro Histórico, cumpliendo con todos los protocolos sanitarios que permitirán posicionarlo como destino seguro para los turistas nacionales y extranjeros.
Turiweb recorrió los principales atractivos del Cercado de Lima y pudo comprobar que estos espacios culturales, históricos y gastronómicos ya cuentan con los implementos y medidas de seguridad necesarios (uso de mascarilla, alcohol en gel, distanciamiento social, etc.) para recibir a los visitantes y prevenir la propagación del Covid-19.
El municipio capitalino está a la espera del visto bueno del Gobierno para reactivar sus programas turísticos presenciales, que incluirán nuevas experiencias y sitios por visitar. Un producto muy interesante para las agencias de viajes, operadores y guías de turismo.
“El Centro de Lima ya no es la visita a los lugares de siempre, hay muchas experiencias nuevas que probar y lugares que visitar. Por ello, la Municipalidad de Lima involucra en sus estrategias a los estudiantes de turismo, los gremios y medios de comunicación, con la finalidad de dar a conocer iniciativas diferentes con actividades para toda la familia”, comentó María Paz Ramos, subgerente de Turismo de la Municipalidad de Lima.
*A continuación, el recuento del press tour organizado el jueves pasado por la comuna limeña, con imágenes captadas por nuestra cámara:
CATEDRAL Y PALACIO ARZOBISPAL
El Centro Histórico de Lima, declarado por la Unesco en 1991 como Patrimonio Cultural de la Humanidad, fue el epicentro de la colonia española en el siglo XVI y aquí erigieron las primeras edificaciones, como la Plaza Mayor, atractivo principal de la ciudad, iglesias, calles, plazas y monumentos. Los visitantes también pueden conocer los atractivos, costumbres, tradiciones y experiencias más importantes que forman parte de nuestra historia.
Al frente de la Plaza Mayor se encuentra la Catedral de Lima, uno de los edificios más solemnes del país, que invita a descifrar los símbolos e íconos que adornan su noble fachada y contemplar lo mejor del arte colonial peruano. Junto a ella se ubica el Palacio Arzobispal, hecho para rememorar las celebraciones de 1924, con un estilo que evoca la elegancia de las casas coloniales y sus hermosos balcones.
La Catedral no sólo es un centro religioso, sino también histórico y artístico de la cuidad. Aquí se puede encontrar la historia del mausoleo de Pizarro, con una réplica y la investigación sobre su fallecimiento; representaciones religiosas como la de Santa Apolonia, patrona de los dentistas; retratos de incas y virreyes como el conde de Superunda, de autoridades coloniales y eclesiásticas que llegan hasta el cardenal Vargas Alzamora, entre otros.
Las bóvedas, retablos y altares, como el altar mayor, muestran los estilos artísticos europeos renacentistas, barroco, neogótico y neoclásico; cambios de estilo debido a las restauraciones, uso de materiales como el mármol o maderas de Portugal y también por los gustos de la época, como las restauraciones de Matías Maestro.
CASA FERNANDINI
El circuito turístico también busca relacionar los tradicionales espacios coloniales con las casonas históricas más modernas, como la Casa Fernandini, ubicada en la cuadra 4 del jirón Ica. Es una de las mejores representantes del Art Nouveau en Lima, el cual floreció en Europa entre 1890 y 1910.
La casa fue construida en 1913 a solicitud del próspero empresario Eulogio Fernandini y allí vivió Anita Fernandini de Naranjo, primera alcaldesa de Lima en el periodo 1963, nombrada durante el gobierno de Nicolás Lindley.
El diseño le pertenece al famoso arquitecto Claude Sahut. El sello propio de esta casa se refleja en la parte alta de la misma en donde hay unas espectaculares barandillas metálicas de forma curva lo cual la hace única en Lima, además del uso de los mosaicos multicolores que le dan una gran policromía.
PARQUE DE LA MURALLA
Otro atractivo infaltable por visitar es el Parque de la Muralla, espacio público que alberga un fragmento restaurado del antiguo tajamar o muralla que protegía a la ciudad de las crecidas del río Rímac. Su nombre hace alusión a la vieja muralla que protegió a la ciudad desde finales del siglo XVII hasta 1870 aproximadamente.
Esas murallas fueron una fortificación constituida principalmente por muros y bastiones y 10 portadas. En este parque se encuentra la estatua del fundador de Lima, Francisco Pizarro, así como un museo donde se exhiben piezas arqueológicas halladas en las excavaciones llevadas a cabo en esta zona.
El tour incluye una demostración sobre cómo preparar una bebida típica peruana y una degustación de Pisco, como los de la hacienda Don Reynaldo, cuyas hijas y nietas continúan con la tradición de su fundador.
Los espacios gastronómicos también destacan en este lugar, como el restaurante La Muralla, que ofrece no solo una variada carta sino también una bonita vista al río Rímac y al puente de Piedra, que rememora las antiguas historias de Lima y los paseos a Amancaes. Dicho establecimiento también administra el Damero Café.
La apuesta del municipio es seguir promoviendo los sitios históricos, para abrir espacios gastronómicos que cubran la demanda de la actividad turística local y extranjera, además de generar oportunidades para que los limeños reconecten con su núcleo histórico y reconozcan una cara distinta de su propia ciudad.
Asimismo, la comuna busca incluir a los barrios aledaños a la Muralla a su programa de muralización y, finalmente, está creando aplicaciones y paneles informativos para brindar facilidades a los grupos turísticos. Se espera que el Gobierno brinde mayores facilidades a los museos privados para que puedan operar y recibir visitantes, pues también cumplen con los protocolos sanitarios correspondientes.