Las autoridades en Italia impidieron este jueves el desembarco de un buque crucero con unas 7.000 personas a bordo, incluyendo la tripulación, por temores de que una pareja de pasajeros chinos estuviera contagiada con el coronavirus que surgió en China hace unas semanas.
Tres doctores y una enfermera abordaron el barco Costa Smeralda, en el puerto de Civitavecchia, ciudad costera al noroeste de Roma, para atender a una mujer de Macao que manifiesta fiebre.
Ella y su esposo -que no presentaba síntomas- fueron aislados y se les practicaron unos análisis. Los exámenes de laboratorio descartaron el contagio con el nuevo coronavirus en la pareja china a bordo de un crucero bloqueado en un puerto italiano, un suspiro de alivio para los 7,000 pasajeros, que podrán desembarcar.
Los exámenes efectuados por los especialistas del hospital romano Spellanzani “arrojaron resultado negativo”, precisó el Ministerio de Salud, razón por la cual los 6,000 turistas y 1,000 miembros de la tripulación pueden dejar la nave.
Los pasajeros permanecieron toda la jornada bloqueados dentro del crucero Costa Esmeralda hasta que se conocieron los resultados definitivos de los análisis.
China informó ayer del peor balance de muertos por el nuevo coronavirus en un día, 38 fallecidos; así, el número se elevó a 170, mientras aumenta la preocupación en el mundo con cada vez más contagios, incluyendo a tres japoneses a los que se les había evacuado del epicentro de la epidemia.
En Estados Unidos, una mujer contagió a su marido con el nuevo coronavirus chino en el estado de Illinois, constituyéndose en el primer caso de transmisión local registrado en esa nación. Al menos 15 países reportaron infecciones, incluido el primer caso registrado en la India.