Caso Booking: cuando un tema comercial se confunde con abuso de dominio [EDITORIAL]

Análisis y propuesta de solución a los reclamos hoteleros.


En el Día Mundial del Turismo, más allá de resaltar lo que todos ya sabemos –que el turismo es la tercera actividad económica del país, que es el sector con mejores índices de crecimiento y que tiene el mayor potencial de desarrollo–, creo necesario analizar un tema que ha generado polémica en los últimos días y que tiene que ver con la innovación y la adaptación a las nuevas tendencias del mercado.

La globalización, la apertura económica y el avance tecnológico han cambiado las reglas del libre mercado. Las alianzas, fusiones y absorciones corporativas, al igual que la aparición de nuevos modelos de negocios basados en el comercio electrónico, forman parte de esa evolución que ha reformulado las relaciones comerciales entre los grandes grupos dominantes y las medianas y pequeñas empresas que luchan por no desaparecer.

Enfocándonos en el sector turismo, en el camino hemos visto cómo las agencias de viajes tuvieron que adaptarse a la reducción casi total de las comisiones por la venta de pasajes aéreos y, al mismo, tiempo adecuar su negocio a la era digital ante la llegada de las agencias online (OTAs).

En el caso de la industria aérea, vemos cómo las líneas aéreas tradicionales están alineándose cada vez más al modelo de bajo costo propuesto por las aerolíneas low cost (bajando sus tarifas y diferenciando sus servicios), para no perder competitividad como otras que no leyeron bien la demanda actual y terminaron desapareciendo.

Esta tendencia también ha llegado a la industria de la hospitalidad, con el boom de Airbnb y su economía colaborativa que ha removido los cimientos de la hotelería convencional, así como el creciente dominio de las reservas por parte de Booking, Expedia y otros sitios web de alquiler de alojamientos.

Pero, a diferencia de los otros rubros, en los últimos días hemos visto que algunos representantes del sector hotelero se resisten al cambio y han exigido al gobierno, a través de sus gremios, regular las operaciones de las plataformas digitales.

El pedido ha llegado a extremos insospechados, al punto de que la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) envió una solicitud al mismísimo presidente de la República, Martín Vizcarra, para que tome cartas en el asunto, como si el Jefe de Estado no tuviera temas más importantes que resolver. Desconocemos si ha enviado una carta directamente a Booking, lo que sería lógico y lo que corresponde en este caso.

SOLUCIÓN PRÁCTICA

Volviendo al análisis. En el caso de Airbnb, se trata de un tema complejo pues requiere modificar el Código Civil que regula el alquiler de viviendas particulares. En Perú, como en otros países, la normatividad vigente no se ajusta a los nuevos modelos de negocios y las entidades públicas conocen poco o nada sobre el asunto en cuestión, dejando vacíos legales difíciles de suplir. Para superar este entrampamiento, solo queda analizar y tratar de adaptar lo que hagan otros países al respecto.

Queda claro, entonces, que está pendiente una urgente regulación en materia tributaria y de seguridad. Caso contrario es el reclamo que hacen los hoteleros en contra de Booking, que ha incluido en sus tarifas publicadas el 10% que cobran los hoteles a sus huéspedes como cargo por los servicios adicionales (léase propinas). A nuestro juicio, es un tema netamente comercial que se está confundiendo con una supuesta ‘ilegalidad’ o abuso de dominio y donde nada puede hacer el Estado. Explicamos por qué:

Booking es dueño de su plataforma de reservas (así como las aerolíneas de sus aviones y los hoteles de sus propiedades) y, como tal, es libre de establecer las condiciones que crea más conveniente para su negocio. Como intermediador entre los proveedores (alojamientos) y sus usuarios, tiene derecho a querer transparentar los precios para que sus pasajeros no asuman cargos adicionales a lo ya pagado en la reserva. Y al tratarse de una venta, lo lógico es que cobre una comisión por esa transacción.

Para los hoteles esta comisión no debe aplicar a las propinas, ya que este recargo no está gravado en el Perú. Sin embargo, hablamos de una operación hecha en el extranjero y por un intermediario no radicado en el país, razón por la cual exigir una regulación en esta materia caería en saco roto.

Ojo, nosotros respaldamos y apoyamos toda intención justa que busque defender los intereses de los trabajadores; pero creo que, en este caso, la medida no parece injusta y tampoco tendría que significar un recorte de sus ingresos.

Atención hoteleros, la solución es muy simple: la normatividad permite a los hoteles cobrar entre un 10% y 13% de recargo por servicios, lo que les da un margen de 3% para proteger lo recaudado por propinas.

Por ejemplo, si la tarifa es de US$ 100 y el recargo es de US$ 10 (10%), pueden enviar a Booking el precio final agregando no un 10% sino un 13% por los servicios. Así, el hotel mantiene su tarifa habitual y la plataforma cobra su fee sobre los US$ 13 adicionales, dando como resultado poco más de los US$ 10 originales de propina. Así todos felices y contentos.

Un dato adicional, en la prensa internacional se dice que el deseo de Booking es llegar a comisionar no sólo sobre el precio de la habitación y las propinas, sino también sobre todos los gastos complementarios, como wi-fi, estacionamiento, lavandería, comidas u otros conceptos. Pero esta intención podría resultarle cara, pues encarecería sus tarifas frente a otros sitios web de reservas, como Expedia, restándole competitividad. Además, en Europa y Asia ya ha aparecido la plataforma Bidroom, que cobra cero comisiones a los hoteles. Por tanto, existe la posibilidad de que, a mediano o largo plazo, la plataforma desista de sus ambiciones. Solo el tiempo lo dirá.

Conclusiones: demanda y competencia son los mejores reguladores del mercado; analicemos con calma nuestros reclamos, si son justos o no, si son viables o no; evitemos el innecesario intervencionismo estatal y adaptemos nuestros negocios a las nuevas tendencias. Y que los gremios dediquen sus esfuerzos a promover la innovación y redirijan sus exigencias al gobierno para que mejore la infraestructura turística y luche frontalmente contra la informalidad y la inseguridad, que tanto afectan al sector.

¡Feliz Día del Turismo!

Juan Carlos Castro
Director General
TURIWEB
juancarlos@turiweb.pe

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