El fondo de cobertura estadounidense Elliott Management se opone a un nuevo plan de la aerolínea brasileña Azul para comprar algunas de las rutas operadas por su rival Avianca Brasil por US$ 145 millones, según un documento legal visto por la agencia Reuters.
Elliott, conocido en América Latina por forzar a Argentina a realizar pagos más grandes de bonos en incumplimiento, es el mayor acreedor de Avianca Brasil por un amplio margen, con reclamos que totalizan casi US$ 490 millones.
Avianca Brasil se declaró en bancarrota en diciembre, lo que generó una disputa por sus rutas entre las tres aerolíneas más importantes de Brasil. La lucha subraya cómo las rutas de Avianca Brasil, que está controlada por la misma empresa controladora que cotiza en bolsa Avianca Holdings SA, con sede en Colombia, se han vuelto ferozmente buscadas a pesar de los problemas financieros que lo llevaron a la protección por quiebra.
Detrás de escena, Elliott ha usado su dominio como acreedor para influir en la disputa sobre las rutas. Los documentos legales muestran que Elliott elaboró el plan de reorganización de la quiebra actual, que Azul ha respondido con su nueva propuesta este mes.
Si bien el veredicto final está en manos de un juez, el fondo de cobertura le pide al tribunal que desestime la propuesta de Azul y mantenga su propio plan intacto, lo que beneficiaría a los dos grandes rivales brasileños de Azul: Gol y Latam Airlines.
Ambas aerolíneas han firmado acuerdos con Elliott para pagar al fondo de cobertura un total de US$ 70 millones.
La influencia de Elliott en el proceso de quiebra ha generado interrogantes entre los acreedores sobre el origen de sus préstamos, incluido el operador de manejo de aeropuertos Swissport International AG, que Elliott ahora acusa de trabajar para promover la agenda de Azul.
Los documentos muestran que Elliott no le prestó dinero directamente a Avianca Brasil, sino a compañías controladas por el mismo grupo, incluido un campo de aceite de palma en Colombia y un astillero con sede en Río de Janeiro.
Si bien Azul ha acusado previamente a Elliott de participar en acuerdos «espurios» destinados a perjudicar el negocio de la aerolínea competidora, el fondo de cobertura dijo que las reclamaciones de Azul eran «torpes, típicas de alguien frustrado con su propio fracaso».
La propia Avianca Brasil aún no ha analizado el plan de Azul y se negó a comentarlo este lunes. Gol también se opone al plan de Azul y Latam todavía tiene que dar una opinión.