La aerolínea estadounidense American Airlines anunció el viernes la suspensión de sus vuelos a Venezuela en medio del deterioro de la situación humanitaria y el aumento de las preocupaciones de seguridad en el país.
«American ha suspendido temporalmente nuestra operación en Caracas y Maracaibo», dijo la aerolínea en un comunicado. «La seguridad y protección de los miembros de nuestro equipo y clientes siempre es lo primero y American no operará en países que no consideramos seguros».
American Airlines tenía hasta ahora dos vuelos por semana a Caracas y uno a Maracaibo, todos desde Miami.
El jueves en la noche, el presidente de la Asociación de Pilotos Aliados (APA) instruyó a sus miembros a rechazar las asignaciones de Venezuela. Daniel Carey señaló que el Departamento de Estado advirtió sobre el crimen y la detención de ciudadanos estadounidenses. Estados Unidos sacó a sus últimos diplomáticos del país el jueves.
«Hasta nuevo aviso, si le programan, le asignan o lo reasignan a Venezuela, rechace la misión y llame a su piloto jefe o al Centro de Control de Operaciones de los pilotos», dijo en un comunicado enviado a la agencia AFP por APA, que agrupa a 15.000 pilotos de la aerolínea estadounidense.
El 23 de enero, el mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció la ruptura de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos -después de que Washington reconociera al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino- y ordenó la salida del país de todos los diplomáticos estadounidenses.
En medio del recrudecimiento de la crisis en Venezuela y tras el extenso apagón, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, anunció este lunes el retiro de todos los funcionarios.
Según las directivas del Departamento de Estado, Venezuela está en el nivel máximo de alerta que estipula «no viajar al país debido al crimen, los disturbios, la débil infraestructura de salud, los arrestos arbitrarios y la detención de ciudadanos estadounidenses».
El Departamento de Estado advirtió que «la Embajada de Caracas no está proporcionando ningún servicio consular» y recomendó a los ciudadanos estadounidenses que residan o que estén viajando por Venezuela que abandonen el país.